viernes, 16 de diciembre de 2016

¿Por qué casi nadie ayuda cuando alguien está en necesidad?


 
Contrario a algunos comentarios que recibí sobre la publicación anterior: Experimentos sobre el comportamiento humano, estos artículos, por muy pesimistas que parezcan, son para tomar conciencia de que tenemos el poder de hacer un mundo mejor.


Pero antes, un poco de malas noticias para calentar motores. ¿Listos? Vamos pa' allá!

EL EXPERIMENTO DE APATÍA HACIA EL SUFRIDO (1968)


Una mujer fue asesinada en 1964, los periódicos publicaron que 38 personas se aglutinaron en el lugar durante el ataque, lo vieron y escucharon, pero no hicieron nada. Un par de psicólogos querían saber si el hecho de que estas 38 personas estaban en medio de un grupo, influyó en que nadie se metiera a ayudar.

Invitaron a una serie de voluntarios a formar parte de una conversación, pero con una variante: Cada sujeto estaría en un cuarto a solas y se comunicaría con los demás a través de un intercomunicador.

Durante la plática, uno de los involucrados fingiría tener un ataque de epilepsia, el cual podría escucharse en los parlantes. El que estaba del otro lado, por supuesto, no podría ver, simplemente podía escuchar.

Cuando los participantes que escuchaban esto estaban claros de que la conversación era solamente entre él y la otra persona, salían del cuarto a ayudar al "epiléptico" en un 85% de los casos.

Pero el experimento no acabó ahí. En las siguientes pruebas, los psicólogos involucraron a más de dos personas en la conversación y, nuevamente, hicieron que uno de ellos fingiera tener el ataque de epilepsia. Y cuando los participantes escuchaban esto y sabían que había otras personas en la conversación, fueron a ayudar solamente en el 31% de los casos.

"La gente hoy en día"

¿Qué dice esto sobre nosotros?

Es obvio que cuando hay una emergencia y vos sos la única persona presente, la presión de ayudar es gigantesca. Te sentís 100% responsable de lo que ocurra. Pero cuando estás con otras 10 personas, es casi seguro que te vas a sentir solamente 10% responsable. Lo malo es que es muy probable que las otras personas se sientan 10% responsables también. Y es más difícil que alguien decida ayudar.



Yo sé que suena como que somos personas horribles por esto, pero siempre buscaremos maneras de limpiarnos la conciencia al no ayudar. Nos decimos a nosotros mismos: "Seguramente alguien de los presentes va a ayudar, tal vez alguien más capacitado que yo", "No me toca a mi". Pero claro, si todos nos ponemos en esa mentalidad de: "Seguro alguien más ayudará", al final nadie va a ayudar.

"Probablemente no necesita ayuda"
"Seguro estará bien"
"Supongo que alguien vendrá a ayudar"
"A lo mejor está borracho"

Y esto se traslada a problemas más globales, pues son más los involucrados. El sentido de responsabilidad compartida puede ser utilizado para cosas muy negativas. Por ejemplo:

La mayoría de nosotros somos incapaces de quitarle la vida a alguien, pero imaginate que alguien te hizo daño, tal vez un ladrón que se metió a tu casa y de pronto hay 25 vecinos que lo atraparon y lo están pateando en el suelo. Puedo decirte que es muy probable que vos te sumés a las patadas. 

Aquí, además de dejarte provocar por la arrechura sumada a la psicología de masas, estás compartiendo la culpa y la responsabilidad con 25 personas más, y así uno se siente "menos culpable"... por lo que por muy indignado, preocupado o atento que estés, creerás tener solamente un 4% de culpa y responsabilidad. Y hay un 4% de probabilidades que hagás algo al respecto. Después de todo, no es lo mismo hacer algo malo solito, que hacerlo con 25 personas. Y he ahí lo complicado de todo esto.

"Mejor no me hubiera metido, ahora se me manchó el zapato"


Sé que suena espantoso y casi ninguno de los que está leyendo querrá admitir que es capaz de llegar a eso. Pero es una probabilidad comprobada científicamente.

Hay un último factor que influye y es que existen personas capaces de hacerse pasar por alguien necesitado de ayuda, como forma de atrapar a incautos y aprovecharse de ellos, robarles, estafarles, violentarles, etc. Y claro, en muchos lugares es una posibilidad, pero se ha comprobado que en circunstancias donde no hay prácticamente ningún peligro de que eso suceda, la gente muy raras veces ayuda, pues tienen esa filosofía de: "no me toca a mí".

Un consejo para todo aquél que esté en una situación donde alguien necesite ayuda y haya una multitud cerca. En vez de gritarle a todos por ayuda, buscá a alguien entre el grupo, miralo a los ojos, señalalo con el dedo y dale órdenes claras: "Usted, por favor, ¿puede llamar a una ambulancia? ¿Puede ayudarme a levantar a esta persona? Etc." El "señalado" se sentirá con mayor presión para ayudar y es más probale que lo haga.


Este artículo habla de un porcentaje de gente que no ayuda. Algo muy alentador es saber que a pesar de eso, existen personas que sí lo hacen. Aún con peligro o dificultades de por medio. Y por esas personas este mundo es mejor. Lo que el experimento muestra es que tenemos una actitud de conformismo ya establecida y que tenemos la capacidad de romperla y de hacer una diferencia positiva en las personas, en el entorno, en el mundo.

Felicidades a todos nosotros!!! Bueno, a los que ayudan!!!

@Zambranitis

1 comentario:

  1. Antes era un cobarte y de muchos años para acá hago cosas que incluso me ponen en peligro, no se que cambió... interesante artículo.

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